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Rusia sigue dando vueltas alrededor de las criptomonedas, con declaraciones a favor o en contra de su legalización. Ahora, según unas recientes declaraciones del ministro de Industria y Comercio, Denis Manturov, es cuestión de tiempo que el país legalice las criptodivisas como medio de pago.
«La cuestión es, cuando esto ocurra, cómo se regulará, ahora que el banco central y el gobierno están trabajando activamente en ello«, declaró Manturov durante un evento educativo titulado «Nuevos Horizontes». Pero todo el mundo tiende a entender que … tarde o temprano esto se implementará, en un formato u otro».
El comentario fue en respuesta a si las criptodivisas podrían legalizarse como forma de pago en Rusia.
La respuesta de Manturov de que el gobierno ruso y su banco central están trabajando estrechamente en este asunto arroja algo de luz sobre el anterior desacuerdo que los dos organismos tenían en torno a las criptomonedas. El ministro de Industria y Comercio también aclaró que el banco central de Rusia tendría que ser el primero en formular la normativa sobre criptografía, seguido por el gobierno ruso.
Justo antes de que Rusia invadiera Ucrania en febrero, se produjo una acalorada disputa en torno a la regulación de las criptomonedas, ya que el Ministerio de Finanzas presentó propuestas que contradecían la presión del banco central por una prohibición total.
Anteriormente, el banco central de Rusia propuso prohibir el comercio y la minería de criptomonedas, alegando riesgos para la estabilidad financiera.
El Ministerio de Finanzas tenía una opinión contradictoria sobre el asunto, lo que llevó al presidente ruso Vladimir Putin a instar a las autoridades a llegar a algún consenso.
Según el gobierno, las inversiones rusas en criptodivisas representan transacciones por valor de unos 5.000 millones de dólares al año.
En febrero, el ministro de Finanzas, Anton Siluanov, declaró a los medios de comunicación estatales rusos que podría aprobarse un proyecto de ley sobre la regulación de las criptomonedas tan pronto como este año. «Espero que, en el mejor de los casos, pueda aprobarse en la sesión de primavera», dijo Siluanov.
